domingo, 6 de marzo de 2011

El fin y los medios

Kant pretende ajustarse a unas normas, éstas se consideran correctas independientemente de las consecuencias posteriores que se deriven de la acción realizada. Un ser bueno que actúa siempre por el imperativo categórico sería una persona santa, pero esa santidad que tiene no garantizaría la mejora del mundo en mayor justicia y menor sufrimiento sino que podría significar un empeoramiento de la situación.
Los filósofos Kant y Benjamín Constant tuvieron una gran polémica sobre como debían de actuar las personas ante una situación concreta. Esa situación era:
“Un hombre da cobijo en su casa a un amigo inocente, injustamente perseguido por una banda de malhechores. La banda llega a casa y le pregunta por su paradero”
1º Caso: El hombre revela a los malhechores el lugar en el que se esconde su amigo, ya que está obligado a no mentir por respeto al deber que le corresponde. ¿Obra bien el hombre al decir el sitio en el que está su amigo?
Según Kant si está bien, pero según Constant no.
El inocente juzgado inmerecidamente sufrirá de una manera u otra.
Kant dice que el resultado de la acción es secundario. Si después existe algún mal en forma de dolor o alguna injusticia es una responsabilidad de los demás que por maldad o simplemente estupidez no respetaron la ley moral.
La ética utilitarista (John Stuart Mill) es contraria a la ética kantiana ya que tiene más en cuenta las consecuencias probables de la acción. Por eso, una acción es preferible a otra si esta produce unas mejores consecuencias para las personas. El utilitarismo considera más conveniente aquella conducta que aporte más felicidad al mayor número de personas, y obvia, en cierto modo, la cuestión de los principios.
En la ética de Kant, lo que se busca es la integridad de la persona por lo que la dignidad la dignidad define que el fin nunca justifica a los medios.
La ética utilitarista prefiere la mejora del mundo, por eso hay veces que los medios son justificados por el fin.
Los kantianos radicales optarían por salvar antes a una persona inocente aunque la consecuencia de esta acción fuera la destrucción del mundo. Un utilitarista radical, optaría en este caso por salvar al mundo antes que a una persona inocente.
El problema que existe entre ambas teorías éticas fue estudiado por el filósofo alemán, Max Weber. En su libro habla sobre la ética de la convicción (ética kantiana) y sobre la ética de la responsabilidad (utilitarismo). Qué es más preferible, ¿Una ética de la convicción con un mínimo de responsabilidad, o es mejor una ética de responsabilidad con un mínimo de convicciones irrenunciables? Para Weber, las dos éticas tienen su valor, ya que según que tipo de acción se dé, es preferible una ética de responsabilidad y en otras una ética de convicción.
El pacifista indio, Gandhi renuncia a la violencia por principio sea cual sea su consecuencia posterior. Tiene una postura admirable ante la sociedad, pero si todos fueran así, que hubiera reyes y gobernantes pacifistas que renunciase a su ejército aun sabiendo que otro ejército vecino tiene pensado atacar en cuanto bajen la guardia, serían unas personas insensatas. Por eso se dice que la virtud fundamental es la prudencia, pensar y reflexionar previamente antes de actuar.
Las personas que actúan mintiendo, engañando o incluso robando para conseguir un fin bueno, justifican y nos dan a entender que el fin justifica los medios.
¿Debemos ser kantianos o utilitaristas?


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