lunes, 28 de mayo de 2012

JEAN PAUL SARTRE (1905 -1980)



El hombre está condenado a ser libre”.
Un hombre no es otra cosa que lo que hace de sí mismo”.



Yo encuentro cierta relación entre Nietzsche (“Dios ha muerto”) y la obra de Sartre porque los dos filósofos dan su visión personal y profundizan sobre las consecuencias que tiene para el hombre el hecho de que Dios no exista.
En el caso de J.P. Sartre me parece muy interesante y
original la idea de que el ser humano no ha sido creado por Dios, y que no nace teniendo una naturaleza o esencia humana que determine su vida, sino que está obligado a tomar decisiones y a elegir libremente, y que tiene que responsabilizarse de sus actos, aunque no quiera (“El hombre nace libre, responsable y sin excusas”). De este modo el hombre llega a tener la condición de ser humano en este proceso de autocreación, por su manera de existir, de hacer, de vivir. El hombre es el protagonista principal de su vida. El dirige y crea su proyecto de vida a medida que escoge libremente cómo vivirla (“Cada hombre debe inventar su camino”). Lo importante y lo primero en el tiempo es la existencia, lo que se hace, la manera de ir haciéndose persona:
El existencialismo ateo que yo represento es más coherente. Declara que si Dios no existe, hay por lo menos un ser en el que la existencia precede a la esencia, un ser que existe antes de poder ser definido por ningún concepto, y que este ser es el hombre, (...). ¿Qué significa aquí que la existencia precede a la esencia? Significa que el hombre empieza por existir, se encuentra, surge en el mundo, y que después se define. El hombre, tal como lo concibe el existencialista, si no es definible, es porque empieza por no ser nada. Sólo será después, y será tal como se haya hecho. Así, pues, no hay naturaleza humana, porque no hay Dios para concebirla.
      El hombre es el único que no sólo es tal como él se concibe, sino tal como él se quiere, y como se concibe después de la existencia, como se quiere después de este impulso hacia la existencia;
el hombre no es otra cosa que lo que él se hace. Éste es el primer principio del existencialismo. Es también lo que se llama la subjetividad, que se nos echa en cara bajo ese nombre”.

J. P. Sartre, El existencialismo es un humanismo (1945)


Como vemos, Sartre defiende la idea de que el ser humano está obligado a “construirse” tomando decisiones libremente y asumiendo sus responsabilidades. Así llegará a tener la condición de ser humano.

3 comentarios:

  1. Muy bien, Raquel. Felicidades por tu blog. Espero que la filosfía te ayude a construir tu propio proyecto de vida.
    Suerte.
    Mª José

    ResponderEliminar
  2. like si estas aqui por ismael

    ResponderEliminar